martes, diciembre 19, 2006
"MÍA SARAH", UN COMEDIA ROMÁNTICA CON GENIO
Su joven autor, Gustavo Ron, posee un estilo propio que bebe en las fuentes de los grandes clásicos
Sí, de original cabría calificar a Mía Sarah (2006), la insólita ópera prima de este nuevo realizador, que debuta en el largometraje con una propuesta audaz, contracorriente en el cine español actual. Es más, este primer largometraje destila poesía, surrealismo y magia, valores ausentes en las pantallas de la generación fílmica del nuevo siglo.
Nacido en Madrid (1972), pero formado en Barcelona, Gustavo Ron se licenció en Producción, Guión y Dirección en la famosa London International Film School hace una década. Allí aprendió el oficio –pues llevaba celuloide en la sangre– y comenzó a colaborar en tareas de producción y guión en películas españolas, francesas, alemanas y americanas. Al mismo tiempo, realizó tres cortometrajes: Confuso (1996), Mi tipo de chica (1997) y Por un beso (1998), que ya demostraron su valía como autor. Después, entre otros trabajos –pues también cultiva la composición musical y la poesía–, llegaría la dirección del documental Venancio Blanco, el Vihuelista de Navalcarnero (2004), hasta que consiguió la confianza de dos productores gallegos: Andrés Barbé (Formato) y Julio Fernández (Filmax). Y en el año 2005 se lanzaría finalmente al plató.
Me ha sorprendido muy positivamente este film. En primer lugar, por su tono optimista –el público sale de la sala feliz–, donde un sano pero no ingenuo sentido del humor preside todo el relato. Seguidamente, por su cuidada puesta en escena. Gustavo Ron sabe cine de veras; compone las escenas con sumo cuidado y gran sensibilidad artística, además de lograr secuencias de enorme emotividad sin caer en el sentimentalismo ni en la concesión a la galería. Sobrio pero estimulante, divertido y lírico a la vez, este joven cineasta ha escrito con Edmon Roch un guión donde no sobra ni falta un plano, con unos diálogos bien medidos –cosa nada habitual en el cine español–, con una banda sonora de excepción –poco habitual en el cine español– y un diseño de producción –la ambientación y el vestuario también son de primera–, que se concreta en una planificación en cinemascope donde el colorido asimismo tiene un sentido dramático y hasta simbólico.
Con todo, la película no se queda en la mera estética; va muchos más allá. Veamos, si no, cómo la valoraría el exigente crítico Jerónimo José Martín, presidente del Círculo de Escritores Cinematográficos y profesor de la ECAM:
"Cuesta un poco entrar en el audaz realismo mágico que propone Gustavo Ron. Pero, una vez dentro, se disfruta con pasión, tanto por su factura como por su fondo. Este último desarrolla un atractivo entramado de amores generosos, sutilmente abiertos a la trascendencia y cimentados en el respeto hacia la íntegra dignidad de los demás, sin reduccionismos hedonistas. Esto se articula en un guión abigarrado y en un riguroso trabajo de Ron como director de cámara y de actores. En la primera faceta, destaca su planificación esmerada y sustancial, en la que saca partido a la dirección artística, la fotografía y la música, todas ellas de alta calidad. Y, en cuanto a los actores, resultan especialmente chispeantes Diana Palazón, el joven Manuel Lozano y los inmensos Fernando Fernán Gómez y Phyllipa Law. Pero quizá el mérito mayor lo tiene Verónica Sánchez y Daniel Guzmán, que llenan de autenticidad su descarada trama romántica".
Rodada en Coruña, Betanzos y Londres, Mía Sarah posee reminiscencias de viejos maestros, como Ernst Lubitch, Frank Capra, Leo McCarey, Vittorio de Sica, Gene Kelly & Stanley Donen (Cantando bajo la lluvia), o de jóvenes como Alfonso Cuarón (La princesita), aunque con la personalidad propia de su autor. Un cineasta que está también genial –como ha quedado evidenciado por el comentario de mi colega– en la dirección de sus intérpretes, todos en “estado de gracia”; pues, desde la referida pareja protagonista, el simpático Daniel Guzmán y la encantadora Verónica Sánchez (muy a lo Amélie), hasta el magistral Fernán Gómez –me consta le gustó mucho el guión y por eso aceptó ese importante papel secundario–, nada chirría en el brillante reparto.
No obstante, constatemos la voluntad de expresión de su joven autor: "Mía Sarah es un homenaje a todos los que en algún momento de su vida han sentido la necesidad de contar sus historias, y lo han hecho; un homenaje al espíritu de los grandes abuelos que siempre tenían una historia original en su manga; un homenaje a los hombres y mujeres de espíritu burlón, aquellos que caminan por la vida de la mano del sentido del humor. Pero Mía Sarah es, sobre todo, una película dedicada a todos aquellos capaces de superar cualquier obstáculo para conseguir lo que aman".
De ahí que el giro narrativo y la sorpresa final –no entendida por algunos críticos, quienes la han tachado de “blanca” y que no presenta ningún “malo”– hagan de Mía Sarah una de las películas más innovadoras y atrevidas de ese Joven Cine Español del que tanto estamos necesitados para una renovación de nuestras pantallas comerciales. Ahora falta que el gran público –popular e intelectual– responda favorablemente a la genial propuesta de Gustavo Ron. De momento, apunten su nombre.
(Publicado en www.universitaties.net, 28-XII-2006; y en inglés, en www.us.imdb.com, 31-XII-2006).
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8 comentarios:
Hola José Ma.:
*La película me parece que tiene un guión que lo vas intuyendo a medida que avanzan las secuencias, es un guión en eso "poco original", pero vamos que es muy fácil ver "los toros desde la barrera", quiero decir que es muy fácil opinar y lo difícil es hacerlo.
*No obstante lo dicho anteriormente, tiene el mérito de mostrar lo romántico con elegancia y sin explicitismos innecesarios.
*Tiene el defecto de toda comedia romántica de acabar con finales felices, que por el mismo hecho de serlo son además bastante intuibles.
*Tiene a favor el que no utiliza aquel lenguaje soez propio de algunas de las películas en lengua castellana de los últimos años.
PEDRO Z.G.
Estimado Pedro:
Me parece acertado tu comentario crítico, que espero estimule al autor de MÍA SARAH a seguir en ese tono y saque consecuencias de la opinión de un cinéfilo.
La película, por otra parte, está conectando con el público, pues ya lleva tres semanas en cartel, cosa
bastante insólita para el cine español.
Agradecido, recibe un abrazo de
José María Caparrós
Se trata de una obra conmovedora.
Este film ha alegrado mi corazón por unas horas.
los actores interpretan magníficamente a los personajes, muy complejos todos ellos.
La película no cae en la superficialidad o el sensualismo de otras obras nacionales, mezcla el romanticismo de los personajes con un sabio raciocinio en sus acciones.
El final es inesperado y gratificante,
Estimado Alfonso:
Veo que estás hecho todo un cinéfilo: en pocas palabras, resumes MIA SARAH espléndidamente.
Seguro que te lee el director, Gustavo Ron, que con el éxito de este primer largometraje, ya comienza el segundo.
Un abrazo de tu viejo amigo
José María Caparrós
¿No hay una actriz que se llama precisamente así, Mia Sarah, que ha hecho películas en los 90 y no sé si más recientemente? Creo que hizo una de viajes en el tiempo con Jean-Claude Van Damme. Un saludo afectuoso, y enhorabuena por el blog.
Ciertamente, hay una actriz que se llama Mia Sara (sin h final), nacida en Nueva York, en 1967.
Esta joven y bella actriz (mira su cara en imdb!) ha intervenido en 38 filmes, entre ellos con Van Damme -como muy bien dices-, pero la mayoría de títulos son de TV.
Por tanto, no creo que tenga relación con la de la película, que es muy mayor.
Un saludo muy cordial de
José María Caparrós
he visto recientemente esta película y tendria que destacar que tiene un tono muy optimista. Dani Guzmán es el que más me ha gustado pero el reparto está muy bien. Me encanta Diana Palazón, es muy hermosa, aunque en este film tiene un papel secundario. Sobre la historia, decir que trata el tema de la seducción de una manera muy instructiva. je,je. Para mi punto de vista es una película que te hace pasar un buen rato con elegancia y sencillez.
Saludos A.Rodriguez
Estimado cinéfilo:
Ya veo que has valorado, y comentas muy acertadamente, la ópera prima de Gustavo Ron.
Este nuevo cineasta ya me ha dicho que le han contratado para realizar la segunda película. Necesita, por tanto, apoyos como el tuyo.
Un saludo muy cordial de
José María Caparrós
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